El profesor Leonardo Garnier Rímolo es a partir de este año el coordinador de la cátedra de Introducción a la Economía. El profesor Garnier es licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Costa Rica y obtuvo su doctorado en Economía en la New School for Social Research, New York.

Garnier es Catedrático en la Universidad de Costa Rica, donde ha trabajado como profesor de la Escuela de Economía e Investigador del Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas. Ha ejercido diversos cargos en el sector público, entre ellos el de Ministro de Planificación en la Administración Figueres Olsen y Ministro de Educación durante las Administraciones Arias y Chinchilla. Ha trabajado como profesor de economía de la Universidad Nacional y ha sido asesor de diferentes organismos internacionales. Ha publicado diversos artículos en revistas y libros sobre temas económicos y sociales vinculados al desarrollo. En 2008 publicó junto con Laura Cristina Blanco el libro "Costa Rica: un país subdesarrollado casi exitoso".

Como nuevo coordinador de la cátedra, continúa con los esfuerzos por alcanzar la meta propuesta por la Escuela de realizar una profunda transformación del curso, que lo adapte a las necesidades de los estudiantes de otras carreras y les brinde las herramientas para participar como ciudadanos y futuros profesionales en el debate de temas económicos. El desafío de la Escuela es para Garnier contribuir a que los estudiantes sean conscientes de la realidad económica en que viven y adquieran herramientas útiles en la interpretación y la transformación de su vida cotidiana.

Paso a paso

En 2014 se separaron las poblaciones de estudiantes en dos grupos –estudiantes de economía y estudiantes de otras carreras–, gracias a lo cual pudo iniciarse un proceso de redefinición de los contenidos de los dos cursos para adaptarlos mejor a las condiciones y expectativas de ambas poblaciones de estudiantes. El curso para estudiantes de otras carreras guardó las siglas anteriores, XE-0156.

En el curso destinado a estudiantes de otras carreras, se modificó el método de evaluación para garantizar una mayor uniformidad de los criterios: en el primer semestre del 2014 se eliminó la posibilidad de que los estudiantes se eximieran del examen final de cátedra y la corrección de los exámenes de cátedra se centralizó; en el segundo semestre del 2014 se decidió hacer tres exámenes parciales no acumulativos (en vez de dos parciales y un final), todos elaborados y corregidos por la cátedra; se estableció la práctica de que los profesores cuiden un grupo distinto del suyo.

En 2015, se cambió la bibliografía del curso  y se incluyeron diversos autores que hacen énfasis en la intuición detrás de los conceptos económicos. Aunque ha sido difícil para la cátedra conseguir bibliografía adecuada para estudiantes universitarios de otras disciplinas se han traducido pequeños textos al español para utilizarlos en los cursos.

Se desarrolló también una herramienta para los exámenes de cátedra: los profesores aportan noticias relacionadas con los temas del curso, la cátedra elige un número determinado de ellas. Las noticias sirven como insumo para elaborar las preguntas del apartado de desarrollo. Esto brinda la flexibilidad a cada profesor para dirigir las preguntas en concordancia con los temas cubiertos en clase y permite a los estudiantes leer y comentar noticias económicas.

Asimismo se vinculan los temas con la realidad nacional e internacional, a fin de fomentar la discusión de la realidad económica dentro de las clases. A partir de esta conversación se espera que los estudiantes adquieran una mejor noción de la magnitud que tienen los diferentes conceptos económicos en la vida diaria.

Finalmente, se ha venido haciendo un esfuerzo por mejorar la redacción de las preguntas de selección única en los exámenes. Anteriormente se planteaba preguntas que buscaban, más allá de evaluar los diferentes conceptos económicos, evaluar la comprensión lingüística o lógica del estudiante. Estos “juegos de palabras” capaces de inducir a errores, han sido sustituidos por preguntas más claras dentro de las pruebas.

El profesor Garnier explica que uno de los objetivos de la Escuela y de la cátedra con los recientes cambios es que los estudiantes aprendan más y aumentar los índices de aprobación del curso. Históricamente, el curso se había caracterizado por una tasa de aprobación muy baja entre los estudiantes de otras carreras y en los tres últimos semestres esta tasa ha ido aumentando paulatinamente.Don Leonardo rescata que uno de los mayores logros es el aprendizaje de los estudiantes y la satisfacción de los profesores con el cambio de enfoque.