Conferencia de la cátedra: Características e impacto económico de las personas migrantes y refugiadas en Costa Rica
El martes 21 de mayo, la Escuela de Economía de la Universidad de Costa Rica propuso un espacio intersectorial para poner sobre la mesa el principal tema del 2019: La Reactivación Económica y las medidas para fomentar el empleo.
El evento contó con la representación de algunos sectores que influyen en el mercado costarricense, entre ellos Luis Daniel Soto Castro, viceministro del Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica, Gonzalo Delgado Ramírez, presidente la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (UCCAEP), Laura Cristina Blanco, docente e investigadora de la Escuela de Economía de la Universidad de Costa Rica y Gerardo Corrales, economista y consultor independiente.
Como punto de partida se destacó la relación directa entre empleo y crecimiento económico. Además, se señaló que el contar con capital humano calificado incide sobre el crecimiento.
La directora de la Escuela, Isabel Cristina Araya Badilla, quien participó como moderadora de la Mesa Redonda, comparte una breve síntesis sobre los puntos clave que se abordaron durante la actividad y que considera relevante retomar:
Como punto de partida se destacó que existe una relación directa entre empleo y crecimiento económico. Además, se señalo que el contar con capital humano calificado incide sobre el crecimiento.
Cuando un país cuenta con capital humano con alta calificación, se generan niveles altos de ingreso, se propicia alta productividad, que a su vez genera un mayor crecimiento, y por ende mayor empleo, generando de esta forma un círculo virtuoso. Por el contrario cuando existe baja calificación, se logran bajos ingresos, baja productividad y por tanto poco crecimiento, cayendo en una trampa de crecimiento.
Caracterización de la problemática actual
Todos los expositores coincidieron en señalar que Costa Rica tiene un mercado laboral dual, un mercado que demanda alto nivel de calificación y paga altos salarios y otro de baja calificación y bajos salarios.
La Dra. Blanco hizo referencia a la calificación del capital humano, que realiza la Organización Internacional de Trabajo en 4 categorías: el nivel 1 (sin completar la primaria), el nivel 2 (general básica con algo de educación técnica), el nivel 3 (con 1-3 años de educación vocacional superior) y nivel 4 (3-6 años estudios superiores y postgrado). Comentó que en Costa Rica el 55,65% de la población mayor de 15 años está en el nivel 1, el 32,14% en el nivel 2 y tan solo 1,15% en el nivel 3. Lo anterior, refleja que el grueso de nuestra fuerza laboral estaría dirigido al sector del mercado laboral de baja productividad y bajos salarios.
Estas condiciones demuestran que a nuestra fuerza laboral se le dificulte conseguir empleo y en caso de acceder al mercado laboral, es a empleos en condiciones precarias.
Tales características dan paso a una concentración de la riqueza. En este momento, según señaló Gerardo Corrales, el quintil más rico de la población solo tiene una tasa de desempleo de 1,8%, la cual podría ser atribuible al desempleo natural, es decir existe pleno empleo en ese quintil.
La desaceleración económica no afecta igual a todos los sectores, por lo contrario, el desempleo está focalizado en ciertos grupos etarios. Especialmente en la población más joven, para el cuarto trimestre de 2018, el nivel de desempleo entre las personas entre 15 y 24 años era del 31,7% y entre las de 25 a 34 años es de 10,9. (según la Encuesta continua de empleo del IV trimestre 2018 y el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), 2018)
En el caso de las mujeres, para el IV trimestre 2018 la tasa de desempleo aumenta varios puntos entre las jóvenes de 15 a 24 años, donde el porcentaje es del 37,8% y para el rango que está entre 25 y 34 años el desempleo alcanza los 14,9% (según la Encuesta continua de empleo del IV trimestre 2018 y el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), 2018).
Un problema adicional es que los sectores que demandan más trabajo (comercio, agricultura e industria) son los que mayor contracción han sufrido en los últimos años. En particular la desacelaración que presentó el sector comercio en el primer semestre del 2019, en el que se perdió el 18,7% de los empleos en relación con mismo período de 2018.
Otra problemática es el bajo acceso a financiamiento y endurecimiento de condiciones para las micro y pequeñas empresas. Del saldo total de crédito a marzo de 2019, el 31% está en consumo (aún excluyendo tarjetas de crédito y vehículos), el 20% a crédito corporativo, en tanto que solo el 5% estaba colocado en mediana empresa y otro 5% en micro y pequeña empresa.
Dentro de las posibles soluciones planteadas:
Además, destacó que “desde la Universidad buscamos fomentar una sana discusión en torno a estos puntos de vista y apoyar en la búsqueda del consenso, que permita definir e implementar medidas que realmente generen el dinamismo que requiere con urgencia nuestro país”.
Presentaciones de los expositores:
Reactivación económica y medidas para fomentar el empleo - Luis Daniel Soto Castro